La Piedra de los Soles es un disco monolítico de basalto de olivino con inscripciones alusivas a la cosmogonía mexica y los cultos solares.
popularmente llamado Calendario Azteca o Calendario Mexica por tener la Cuenta de los Días, las Eras y aspectos calendáricos.
Las interpretaciones sobre la función y el significado de este monolito son diversas entre especialistas desde su redescubrimiento en el siglo XVIII.
Según estudios, fue construida por los mexicas entre los años 1250 y 1479 d.C. (La fecha exacta no se conoce)
Se dispone de algunos datos para rastrear tentativamente su historia desde el momento de su construcción.
A principios del siglo XVI, Hernando Alvarado Tezozomoc, nieto del emperador Moctezuma II y bisnieto de Axayácatl, contó en: “Crónica Mexicatotl” cómo su bisabuelo mandó esculpir en aquella piedra “las figuras de los meses y años, días y semanas con tanta curiosidad que era cosa de ver”. Ocurrió en 1479, cuatro décadas antes del desembarco de Hernán Cortés en Veracruz.
Alvarado Tezozomoc explica que, en aquel año, cincuenta mil indios de diversos pueblos cercanos a Tenochtitlan extrajeron el gigantesco bloque “de una gran peña de la falda de la sierra grande de Cuyacan”, la movieron “con sogas gruesas y carretoncillos” y la tallaron con pedernales “recios y agudos” a las órdenes de un artista, cuyo nombre, al parecer, era TÉCPAL (o Tecpatl).
Mide 3,60 metros de diámetro por 122 centímetros de grosor y pesa aproximadamente 25 toneladas
Por otra parte, el nombre azteca de la Piedra del Sol es Cuauhxicalli, que ha sido interpretado como “vaso de las águilas”.
Está compuesta por una serie de círculos concéntricos con símbolos o ideogramas que sintetizan la idea del tiempo que tenían los mexicas según su forma de concebir el mundo y su historia.
En general, los símbolos y los elementos que contiene la Piedra del Sol son la forma en la que los aztecas concebían el tiempo según su cosmovisión.
SIGNIFICADO DE LOS SÍMBOLOS DE LA PIEDRA DE LOS SOLES
La Piedra de los Soles está compuesta por una serie de círculos concéntricos con símbolos o ideogramas que sintetizan la idea del tiempo que tenían los mexicas según su forma de concebir el mundo y su historia.
Por otra parte, el nombre azteca de la Piedra del Sol es Cuauhxicalli, que ha sido interpretado como “vaso de las águilas”.
SIGNIFICADO DE LOS SÍMBOLOS DE LA PUEDRA DE LOS SOLES
Está compuesta por una serie de círculos concéntricos con símbolos o ideogramas que sintetizan la idea del tiempo que tenían los mexicas según su forma de concebir el mundo y su historia.
Primer círculo (Quinto Sol)
Los aztecas dividían el tiempo en soles o eras. Cada era estaba presidida por una deidad. Cada una de estas eras o soles tenía un principio y un final, que era precipitado por catástrofes.
En el primer círculo, la Piedra del Sol contiene el símbolo del Quinto Sol, llamado Tonatiuh, que representa la era actual. De él se desprenden dos garras de águila (que podrían explicar el nombre de Cuauhxicalli o vaso de las águilas). También tiene un cuchillo en lugar de lengua, ya que Tonatiuh se alimenta de la sangre para seguir existiendo.
Para el pueblo mexica, los sacrificios rituales tenían una función sagrada, pues con ellos alimentaban al sol de su era con el fin de no perecer.
Segundo círculo (los cuatro soles o eras)
Contiene los cuatro soles o eras precedentes al Quinto Sol y se leen en sentido antihorario:
- Sol 4 Viento (nahui ehécatl): una era de 364 años que terminó cuando vientos huracanados arrasaron el mundo y convirtieron a los seres vivos en monos.
- Sol 4 Lluvia de Fuego (nahui quiáhuitl): una era de 312 años que terminó con una lluvia de fuego.
- Sol 4 Agua (nahui atl): una era de 676 años, de los cuales los últimos 52 estuvieron bajo fuertes inundaciones que convirtieron a los seres humanos en peces.
- Sol 4 Jaguar (nahui océlotl): una era de 676 años que terminó cuando los seres humanos fueron devorados por animales.
Por otro lado, los soles o eras representan los cuatro elementos de la naturaleza (aire, fuego, agua y tierra) y junto al quinto sol forman Ollín, el símbolo del movimiento.
Tercer círculo (días del mes)
Los cuatro soles o eras están rodeados de un círculo que contiene 20 ideogramas que corresponden a los 20 días del mes azteca. Cada uno de los días del mes tenía un nombre asociado con un elemento de la naturaleza.
- Cipactli (caimán)
- Ehecatl (viento)
- Calli (casa)
- Cuetzpallin (lagarto)
- Cóatl (serpiente)
- Miquiztli (muerte)
- Mazatl (venado)
- Tochtli (conejo)
- Atl (agua)
- Itzcuintli (perro)
- Ozomatli (mono)
- Malinalli (pasto)
- Ácatl (carrizo)
- Ocelotl (jaguar)
- Cuauhtli (águila)
- Cozcaquauhtli (buitre)
- Ollín (movimiento)
- Tecpátl (obsidiana)
- Quiahuitl (lluvia)
- Xochitl (flor)
Cuarto círculo (ciclos venusinos)
Este anillo está compuesto por 40 secciones de cinco puntos llamadas quinqunces (figuras de cinco puntos que forman un cuadrilátero) y 8 triángulos o rayos.
Los quinqunces se han interpretado como un símbolo de los movimientos de Venus, ya que por cada cinco vueltas de este planeta alrededor del Sol, han pasado 8 años del ciclo solar o civil, lo que al multiplicarse da 40.
Quinto, sexto y séptimo círculo
En estas secciones hay distintos elementos, como figuras con forma de arcos, plumas y otros detalles de los que han surgido varias interpretaciones: la unión del cielo y la Tierra, a los planetas Marte, Mercurio y Saturno o a la Vía Láctea.
Octavo círculo (dualidad)
Este último anillo tiene dos serpientes de fuego o xiuhcoatls enfrentadas y rodeando con sus colas todo el monolito para “cerrar” la piedra. Se cree que son la representación de conceptos duales como el día y la noche, el oriente y el poniente, cielo y tierra, etc.
En este círculo también está el glifo que representa el día 13-acatl o 13-caña, que corresponde al año 1479, lo que se ha tomado como fecha de finalización del monolito.
HISTORIA DE LA PIEDRA DE LOS SOLES
La Piedra de los Soles estuvo en el centro de México-Tenochtitlán, capital del imperio azteca, hasta la llegada de los españoles en el siglo XV. Luego fue desplazada hasta el Templo Mayor, cerca del Palacio Virreinal, en donde estuvo expuesta hasta que Alonso de Montúfar, arzobispo de México, ordenó enterrarla.
El 17 de diciembre de 1790 la Piedra del Sol fue descubierta mientras se realizaban trabajos urbanísticos en la capital mexicana.
La Piedra de los Soles actualmente se encuentra en el Museo de Antropología e Historia en la ciudad de México.